"CUPONAZO EN LA MORAÑA"

El vendedor de Sanchidrián José Antonio Jiménez repartió el viernes unos 12 millones de euros entre la Moraña y Muñopedro (Segovia) con el número 19.850, el ganador del Cuponazo • En Ávila estima que ha dejado 1,5 millones

Ofelia, una de las agraciadas, abraza a 'su' vendedor de la ONCE, José Antonio Jiménez.

Antonio Bartolomé.

M. ESPESO

A partir de ahora será algo así como el ‘héroe’ de la comarca, «el duende de la ONCE», según sus propias palabras. No es para menos. José Antonio Jiménez, vendedor salmantino de la afincado en Sanchidrián desde hace casi diez años, repartió en la noche del viernes la friolera de 12 millones de euros. Así, de un plumazo. El 19.850, un número «feo», le dio la suerte a él, como «orgulloso» vendedor, y a los 80 habitantes de la Moraña abulense y del pueblo segoviano de Muñopedro que le compraron un boleto para el Cuponazo de los viernes. Él se lo había dicho, «llévatelo que toca», aunque ayer, todavía eufórico por su suerte, reconocía que «lo de que sientes un pálpito es una tontería, yo no sentí que iba a tocar».
Pero tocó. El primer premio del Cuponazo, los 9 millones de euros que dio la serie 95 del 19.850, se ha ido a parar «casi con toda seguridad» a la localidad segoviana. Las dos series de 150.000 euros que cree que ha vendido (devolvió varias) también «parece» que han viajado a la provincia vecina, así que en la Moraña abulense estima que ha dejado en torno a 1,5 millones de euros, los correspondientes a 40 cupones dotados con 35.000 euros cada uno.
Sanchidrián, en su centro de día y en gente del pueblo, Tiñosillos, en un bar, la urbanización Pinar de Ponteviejo (Maello), en un restaurante y una tienda, y Velayos, en la frutería, son algunas de las localidades abulenses donde José Antonio Jiménez ha dejado huella, aunque también podrían sumarse varias que «tengo en duda, como Papatrigo o Riocabado, la Vega de Santa María y Santo Domingo de las Posadas».
Muy simpático y bromista, el vendedor nos citó en el bar del Centro de Día de Sanchidrián, donde ayer «los cafés los pagó la ONCE» porque su inquilina, Ofelia, fue afortunada por partida doble; se quedó con un décimo y vendió algunos otros de los que le deja José Antonio.
¿Y como se enteró de que había dado su primer Gordo?, le preguntamos al joven. «Me llamaron de Muñopedro y me dijeron que había hecho rico a medio pueblo. Al principio no me lo creía, pero miré los cupones rotos que había devuelto y entre ellos vi el 19.850, así que confirmé y dije ‘ya la he liado’». A partir de ahí, a festejarlo «muy efusivamente». Aunque él no llevaba nada, declaró estar «muy contento, muy ilusionado», porque «lo bueno es que ha tocado a gente de pueblo, honrada, trabajadora, al de las vacas, al jubilado, al albañil que hace tres meses que no trabaja....».
Ahora, «me voy a a hacer un ‘facebook’ de esos porque voy a tener un montón de amigos», apuntaba entre risas José Antonio, que no paraba de bromear: «Me ha llamado el presidente del Gobierno para decirme que soy la solución a la crisis»; «¿lo de Sort?, menudeces, esta sí es la barriga de Sort...».

Diario de Ávila.